No puedes obligar a otros a aceptarte, menos a amarte.
El otro sólo está obligado a respetarte para una sana convivencia.
Una vez, tu aprendas a aceptar tu forma de ser, tu condición, tus preferencias, tus anhelos y deseos, estarás en paz contigo y por ende con el mundo que te rodea.
Una vez, te aceptes y valores, por ser quien eres, dejarás de luchar y buscar amor en otros.
Una vez, te respetes, el otro tendrá que respetar quien eres. Y si su capacidad no se lo permite, ya no sufrirás por ello y continuarás tu vida del lado de los que sí lo hacen.
Como puedes ver, la solución está a tu alcance, porque está en ti.
Depende de ti, de tus decisiones, de tu actuar y tu compromiso por tu bienestar.
Eres valiente al reconocerte y aceptarte abiertamente.
Muy, pero muy pocos lo hacen, y por eso, desde su miedo más íntimo, rechazan y atacan a quien lo logra.
Tú, sigue dando pasos hacía tu felicidad.
Tú, sigue creyendo en ti y abrázate cada vez más.
Tú, sigue dando un paso a la vez, que la vida se encarga de lo demás.
Bravo! Bravo! Bravo! A todos los valientes que deciden vivir en auto aceptación y auto valoración. Bravo!
Commentaires